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Qué significa estar en mora


Cuando una persona o entidad se compromete a realizar un pago en un cierto plazo y no lo hace, se encuentra en lo que se denomina «mora«. Este término lo utilizamos mucho en el ámbito jurídico y debemos saber que tiene implicaciones legales significativas para ambas partes involucradas en la transacción relacionada con el pago. En este artículo os contamos qué implica estar en mora, cómo se puede manifestar y cuáles son las consecuencias legales que conlleva tanto para el deudor como para el acreedor.

¿Qué es estar en mora?

La mora se produce cuando el deudor no cumple con su obligación de pago en el plazo establecido por el contrato o la ley. En otras palabras, el deudor se encuentra en mora cuando no paga a tiempo lo que debe. La mora puede ser tanto en el cumplimiento de una obligación de pago de una suma de dinero como en cualquier otra obligación que tenga un plazo establecido para su cumplimiento.

Como os habéis podido imaginar, la palabra «moroso» viene de este término «mora«. Así, se le llama moroso al que se está retrasando en un pago de una deuda que tiene.

Tipos de mora

Existen dos tipos principales de mora: la mora por requerimiento del acreedor y la mora automática.

La mora por requerimiento del acreedor se produce cuando el acreedor le comunica al deudor su incumplimiento y le requiere el pago de la deuda. En este caso, la mora comienza a contar a partir del momento en que el deudor recibe el requerimiento de pago. Este es el tipo de mora por defecto.

Por otro lado, la mora automática se produce cuando el propio contrato establece que en caso de retraso el deudor se constituye en mora, sin necesidad de requerimiento.

La mora automática también se puede producir cuando así lo establezca la ley. El ejemplo más común es el relativo a las condenas al pago en sentencia judicial. La ley determina que desde que se condena a un deudor al pago en sentencia se encuentra en mora hasta que pague, sin necesidad de requerimiento por el deudor.

Consecuencias y efectos de la mora

La mora tiene importantes implicaciones legales para las partes involucradas en la relación de la que deriva la deuda. Entre ellas, destacamos las siguientes:

1. Intereses de demora: El deudor puede estar obligado a pagar intereses de demora por el tiempo en que se retrase en el cumplimiento de su obligación. Estos intereses suelen estar establecidos en el contrato o en la ley y representan una compensación por el retraso en el pago.

2. Responsabilidad por daños y perjuicios: Además de los intereses de demora, el deudor puede ser responsable de indemnizar al acreedor por los daños y perjuicios que le haya causado su incumplimiento. Estos daños pueden incluir, por ejemplo, la pérdida de oportunidades de negocio o los gastos adicionales incurridos por el acreedor debido al retraso en el pago.

3. Posibilidad de resolución del contrato: En algunos casos, el incumplimiento del deudor puede dar lugar a la resolución del contrato por parte del acreedor. Esto significa que el contrato queda sin efecto y las partes vuelven a la situación en la que se encontraban antes de su celebración. La resolución del contrato puede estar sujeta a ciertas condiciones y requisitos establecidos por la ley. En este artículo os explicamos todo sobre la resolución de un contrato.

4. Inclusión en registros de morosos: En algunas ocasiones, el incumplimiento de las obligaciones de pago puede llevar a que el deudor sea incluido en un registros de morosos, lo que puede tener consecuencias negativas para su reputación crediticia y su capacidad para obtener financiación en el futuro. Esto sucede especialmente cuando contratamos con grandes empresas. En este artículo explicamos cómo reclamar por la inclusión indebida en un registro de morosos.

Recomendaciones para el acreedor en casos de mora del deudor

En nuestra experiencia tratando casos de retrasos en los pagos, os hacemos estas recomendaciones a los acreedores que os encontráis con deudores que no pagan a tiempo:

Realizar un seguimiento de los pagos: Se debe llevar un registro detallado de los pagos recibidos y realizar un seguimiento de los pagos pendientes. En caso de retraso en el pago, es importante enviar un requerimiento de pago al deudor para iniciar el proceso de mora.

Incluir cláusulas de penalización por mora en los contratos: La legislación española permite incluir cláusulas que establezcan penalizaciones por el incumplimiento de los pagos en los contratos. Es importante redactar estas cláusulas de manera clara y precisa, especificando los intereses de demora aplicables, los cargos adicionales por incumplimiento y cualquier otra medida de penalización que se considere necesaria, como la resolución del contrato.

Recabar y conservar pruebas de la deuda y los pagos: En caso de enfrentar reclamaciones o pleitos por morosidad, es fundamental contar con documentación que respalde la existencia de la deuda y los intentos de cobro realizados. Esto puede incluir facturas, contratos, correos electrónicos, registros de llamadas telefónicas y cualquier otra comunicación relacionada con la transacción. Conservar estas pruebas de manera adecuada puede ser crucial para defender tus derechos en caso de litigio.

Conocer bien tus facultades de acuerdo con el contrato y la ley: Parece algo evidente, pero como acreedores debemos de estar bien informados de las facultades legales que nos permiten nuestros contratos y la ley. Por ejemplo, para relaciones entre empresas, debemos saber que existe en España la Ley 3/2004, de 29 de diciembre, por la que se establecen medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales. Esta ley fija unos plazos de pago máximo a los proveedores y establece un interés de demora muy elevado si no se paga a tiempo.

Recomendaciones para el deudor en casos de mora

Si por el contrario, sois deudores os hacemos estas sugerencias en relación con la mora:

Llevar un registro de pagos y fechas de vencimiento: Mantén un seguimiento detallado de tus obligaciones de pago, incluyendo las fechas de vencimiento y las cantidades a pagar. Esto te ayudará a planificar tus finanzas y a asegurarte de que no se te pase ninguna fecha importante.

Crear un presupuesto financiero: Elabora un presupuesto que refleje tus ingresos y gastos mensuales. Esto te permitirá tener una visión clara de tus recursos disponibles y te ayudará a evitar compromisos de pago que no puedas cumplir.

Comunicarte con anticipación en caso de dificultades: Si anticipas problemas para cumplir con tus obligaciones de pago, no esperes hasta el último momento para comunicárselo a tus acreedores. En su lugar, contacta con ellos tan pronto como sea posible para buscar soluciones alternativas, como un plan de pagos adaptado a tus posibilidades.

Priorizar tus pagos: Si te encuentras en una situación en la que no puedes pagar todas tus deudas, prioriza aquellos pagos cuyo incumplimiento tenga consecuencias más graves, como los préstamos hipotecarios o las facturas de servicios básicos. Esto te ayudará a minimizar el riesgo de caer en mora con tus obligaciones más importantes.

Buscar asesoramiento legal: En caso de duda sobre las obligaciones de pago o las consecuencias legales del incumplimiento, es recomendable buscar el asesoramiento de un abogado especializado en derecho civil y mercantil.

Un ejemplo de estar en mora

Por último, os ilustramos lo que os hemos explicado con un ejemplo práctico.

Imaginemos que tenemos un préstamo personal con un banco y acordamos pagar una cuota mensual de 200 euros. Sin embargo, un mes nos retrasamos en el pago y no abonamos la cuota en la fecha acordada. En este caso, estaremos en mora.

Esto significa que hemos incumplido el acuerdo de pagos en el plazo establecido. Cuando nos encontramos en mora, el banco puede aplicar penalizaciones, como cobrarnos intereses adicionales por el retraso, lo que podría aumentar el coste total del préstamo. Además, el banco podría informar de este retraso a ficheros de morosos. Por tanto, es muy importante tratar de evitar situaciones de mora y anticiparnos a ellas.

¡Estamos para ayudarte!

Esperamos haberos ayudado con esta publicación. Si necesitáis nuestra ayuda en esta materia o en una cuestión relacionada, en AINOS estaremos encantados de atenderos.


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