En fechas recientes, la prensa ha informado de que la dirigente política Yolanda Díaz y su marido desde hace 20 años, Andrés Meizoso, se van a divorciar. Una de las cuestiones que ha trascendido en la prensa es que, con el divorcio, el marido va a residir en Galicia, donde tiene su trabajo, y Yolanda Díaz permanecerá en Madrid para atender sus obligaciones como representante de Sumar.
Aprovechamos esta noticia de actualidad para haceros ver cómo pueden tenerse en cuenta estos factores en el divorcio, especialmente en lo relativo a qué ocurre con los hijos cuando los dos progenitores que se divorcian pasan a vivir a lugares distintos y lejanos entré sí.
Ya hemos explicado que el divorcio puede ser contencioso o de mutuo acuerdo. En el primero, los miembros de la pareja no se ponen de acuerdo, decidiendo el Juez por ellos. En el segundo, los cónyuges son capaces de llegar a un pacto sobre qué va a ocurrir tras el divorcio con cuestiones relacionadas con los hijos, las pensiones a pagar, los bienes del matrimonio, etc.
El efecto principal que va a tener que los progenitores vivan en lugares distanciados tras el divorcio es que va a imposibilitar la custodia compartida. Este tipo de custodia exige cercanía entre domicilios, de tal forma que el cambio de turno entre padres no suponga a los hijos menores trastornos en el desarrollo de sus rutinas.
Al excluirse la custodia compartida, eso significa que la custodia va a ser de carácter monoparental, es decir, que va a quedar atribuida a un solo progenitor. Al otro se le concederán derechos de visita y comunicación, pero quien va a convivir de manera ordinaria con los menores va a ser el cónyuge custodio.
Otro aspecto de relevancia que va a surgir en estos casos de distancia geográfica va a ser la necesidad de regular cómo se van a organizar los viajes (días, horarios, acompañamiento del menor, etc.) y quién los va a costear. En el caso de Yolanda Díaz, la distancia es muy elevada entre Madrid y Galicia, por lo que estos aspectos serán relevantes. Estas cuestiones se regulan como parte de los derechos de visita, las pensiones de alimentos y los gastos extraordinarios.
También va a ser relevante que se regule con particular detalle el derecho de comunicación del cónyuge no custodio. En estos casos se sugiere que se especifiquen las formas y los tiempos en que se va a producir esa comunicación (teléfono, ordenador, videollamada, etc.).
Junto a ello, también es recomendable que se pacten con especial detalle determinados periodos del año (normalmente vacaciones) en los que se permita una estancia más prolongada con el progenitor no custodio.
¡Estamos para ayudarte!
Confiamos que este breve comentario del caso de Yolanda Díaz os haya ayudado a despejar ciertas dudas de la distancia geográfica y el divorcio. En AINOS estamos encantados de ayudaros con esta u otras cuestiones relacionadas.
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